Seguro que en más de una ocasión has ido a comer a un restaurante, has pedido una ración de croquetas caseras y te ha surgido la duda: realmente, las croquetas que estás comiendo ¿son caseras?
En muchas ocasiones, si no tienes el paladar entrenado, puede resultar difícil saber si una croqueta es casera o no y si te están dando gato por liebre. En Casino Alcalá te vamos a dar las claves para saber si la croqueta que te estás comiendo es realmente una croqueta casera cocinada con esmero o, pese a que te la vendan como tal, es una croqueta industrial.
Distinguir una croqueta casera de una industrial
Aunque existen croquetas industriales muy logradas, las croquetas caseras tienen una serie de características que distan de las industriales. Te damos algunas claves para que puedas identificar si una croqueta es realmente casera.
Forma de la croqueta
Por norma general, las croquetas caseras suelen tener una forma más irregular que las croquetas industriales. Las croquetas caseras están hechas a mano, por lo que la cantidad de producto que se coge para realizar cada croqueta puede variar, así como la forma de cada croqueta, que puede variar ligeramente de una a otra.
Otro aspecto a destacar en las croquetas caseras respecto de las industriales es la ausencia de marcas de reposo en malla. En las croquetas industriales pueden percibirse algunas líneas finas en el rebozado, que serán más visibles cuanto más cremosa sea la croqueta. Las croquetas caseras carecen de este tipo de marcas.
Textura de la croqueta
Y si hay un elemento diferenciador de las croquetas caseras es su textura. Y es que, al cocinarlos, el objetivo no es otro que hacer honor a su nombre (“comer algo que cruje”) con una textura melosa en su interior. Sabrás que se trata de una croqueta casera si es cremosa por dentro y crujiente y dorada por fuera. ¿El truco? A la hora de freír hay que usar mucho aceite y debe estar muy caliente.
Cómo hacer una croqueta casera perfecta
Las croquetas tienen su origen en Francia. Su nombre proviene de la onomatopeya “croquer”, que significa crujir, y la primera referencia escrita data de 1817 de manos de Antonin Carême, un cocinero de Luis XIV que sirvió sus exquisitas croquettes à la royale durante un banquete. Pero ¿cómo debe ser una buena croqueta?
Las mejores croquetas caseras de Alcalá de Henares
En Casino tenemos las mejores croquetas caseras de Alcalá de Henares. Nuestras croquetas, como el resto de los productos de nuestra carta, están elaboradas con ingredientes de primera calidad y las recetas elaboradas con mucho mimo y al más puro estilo tradicional ¡Te recordarán a las de tu madre!
Ramón Cuesta, jefe de cocina de Casino Alcalá nos cuenta el secreto para conseguir una croqueta casera perfecta:
“Es esencial un buen cocinado de la harina para evitar grumos y trabajar bien la roux para obtener la jugosidad. En Casino Alcalá añadimos trisol, una fibra soluble derivada del trigo, compuesta por pura dextrina de trigo 100%. De esta manera logramos que las croquetas no se abran y queden crujientes. Además, añadimos un buen caldo del producto principal y leche entera”.
En definitiva, la croqueta es una receta popular llena de trucos que marcan la diferencia. Te invitamos a venir a Casino Alcalá y a degustar nuestras croquetas caseras de jamón ibérico.
Casino Alcalá es elegancia, calidad, distinción, exquisitez… Un espacio para todo tipo de cenas, comidas y eventos. Vive una experiencia gastronómica inolvidable.
“Una receta no tiene alma. Es el cocinero quien debe darle alma a la receta”.
Thomas Keller